LR 11 – Radio Universidad –
“CANTO EN AZUL Y BLANCO”
Micro
Nº 198 – 14/03/2015
Con su licencia, paisano! Acomodado
en la cocina grande, junto a la ventana para tener mejor luz, mientras gustamos
un mate, vamos a ver si hablamos de “Poetas Criollos… y otras yerbas”.
Hoy vamos a intentar evocar a un poeta,
que con solo un par de temas se ha ganado un lugarcito en la consideración de
los versos gauchos. Nos referimos a quien llevó por nombre: CARLOS
MARÍA CERVETTI –
Porteño, nacido en la “patria” fecha del 25/05/1925 en la ciudad de Buenos Aires, fue hijo Doña María Teresa (desconocemos su
apellido) y Don Enrique Argentino Cervetti.
Deducimos que cursó
estudios en la ciudad de nacimiento, ingresando a paso seguido a la carrera
militar en Gendarmería Nacional, arma abocada a la custodia de las extensas
fronteras de la patria, en la que llegó a graduarse como Comandante. La mayoría
de los componentes de estos cuerpos, son gente muy identificada con el
yeguarizo y el mular, animales indispensables para el difícil desplazamiento
por las intrincadas fronteras de selva o montaña.
Sabemos por referencias
de Tonito Rodríguez Villar, quien cuenta haber disfrutado de su amistad, que en
el 2° lustro de la década del ‘50, era un asiduo concurrente a la “Peña de
Fanny” -apodo de Esilda Aragón, creadora
de ese espacio-, en Cerrito 34, donde compartía y participaba con la flor y
nata del folklore que hacía sus armas por Buenos Aires y donde seguramente alguna vez
habrá interpretado “Los de Lanza y Guitarra” que había escrito hacia 1952 y que
mucho tiempo después llevara al disco Miguelito Franco.
En aquellas tenidas,
muy probablemente conoció a Alberto Merlo, quien luego le grabaría, alcanzando
amplia difusión, su muy bien logrado poema “El Rancho”.
Sabemos de este poeta,
que entre 1962 y 1964, estuvo radicado con su familia en Estados Unidos, en la
ciudad de Nueva York, a raíz de desempeñarse como “agregado” en la Embajada
Argentina.
Entre sus amigos
recibía el íntimo trato de “Vasco”, y como tal, se lo recuerda y evoca como un
“vasco buenazo”.
Una anécdota entre
nosotros que lo vincula: cuando en 1981 se realizaron los encuentros
tradicionalistas predecesores a los del Centenario de la Ciudad de La Plata, la Comisión Pro-Festejos de
la Tradición, recibió un invalorable apoyo del gobierno provincial;
allí, muy próximo al gobernador de entonces se encontraba un Comandante de
Gendarmería, que se brindó por la fiesta, y a iniciativa suya fue, que a los
programas de entonces, se agregara una hoja suelta, impresa en papel celeste,
con los versos de, “Los de Lanza y Guitarra”, estos que vamos a dejarle ahora a
los oyentes.
Antes, contamos que
falleció el 26/01/1976, con jóvenes 50 años.
Estupendo aporte!
ResponderEliminarGracias Gabriela
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