sábado, 1 de mayo de 2021

JOSÉ JUAN BIANCHI

 Nació  el  6/05/1897, en  la  localidad de Abasto, partido de La Plata, siendo hijo de María Josefa Toretti y José Bianchi. Posteriormente la familia se traslada a Capital Federal, donde aprende y ejerce la profesión de protésico dental, instalando en 1918 su propio laboratorio, al que luego ingresaría su hermano menor Eusebio, integrando la sociedad Bianchi Hnos.


Al casarse, hacia 1920, con Ana Ferradini se afinca en el porteño barrio de Villa Luro, donde nacen sus cuatro hijos.

Preocupado por el desarrollo y organización de su profesión, fue miembro fundador de la cooperativa “La Dental Argentina” y director de su órgano informativo, la revista “El Cooperador Dental”; en 1937 participó de la creación de la “Asociación de Protesistas Dentales”, habiendo sido su presidente de 1939 a 1947, y de 1948 a 1956, habiendo dirigido también la revista “El Mecánico Dental”.

Desde 1930 se dedicó a la difusión de las danzas folclóricas en las escuelas de la zona oeste de Capital Federal.

Fue fundador en 1938, de la Asociación de Fomento “Amigos de Villa Luro”, y en la misma, el 11/7/1946 fundó la Peña Folklórica “El Aromo”.

Hacia 1948 lo encontramos vinculado al “Grupo Tucumán”, Asociación de Escritores, Poetas y Artistas de América Latina.

Con un grupo de poetas y escritores funda la Asociación Autoctonista Argentina “Juan María Gutiérrez”, y en abril de 1963 integra el grupo fundador del “Museo Criollo de los Corrales” del barrio de Mataderos, habiendo integrado varias comisiones directivas.

Colaboró con la revista “Nativa” de su amigo el poeta cordobés Julio Díaz Usandivaras, y también con “La Carreta”, de Avellaneda, y “La Pampa Argentina”, de Buenos Aires.

Luchador inclaudicable en defensa de la tradición, al decir de sus hijos: “escribió ininterrumpidamente desde 1920, preferentemente versos criollos en el lenguaje popular del campo bonaerense”, según Abad de Santillán.

Su amplia producción se compone de: “Cardos de mi tierra” (1933), “Cosas de muchacho” (1938), “Campo Sureño” (1942), “Poncho Pampa” (1952), “Los Motivos” (1957), La Canción de mi Pago” (1962), “Bajo el lucero” (1971), “Glosas para mis danzas”.

A los 86 años de edad, falleció en Villa Luro el 25/09/1983, y a su pedido, sus cenizas fueron esparcidas en el predio de su casa natal de 206 y 526 -Abasto-, a la que siempre visitó los fines de semana, hasta el año 1979.

JOSÉ AGUSTÍN DILLÓN

 Nació el 28/08/1855 en el entonces pueblo de Merlo.

Fueron sus padres Doña Josefa Ballesteros Warnes y el Comandante de Guardias Nacionales Don Juan Dillón, quien también supo ser diputado y senador.


Hizo vida de campo hasta su adolescencia, en que ingresó a la recién creada Escuela Naval que fundara Sarmiento, pero no adaptado al rigor de ese estudio, volvió a su pago, donde durante mucho tiempo hizo vida gaucha.

Más tarde, en su pueblo natal fue Juez de Paz y Comandante de Milicias.

Políticamente apoyó la candidatura de Bernardo de Irigoyen, integró el Partido Republicano que encabezaba Aristóbulo del Valle, y luego se alineó con el Dr. Leandro Alem.

Los vaivenes de la política le hicieron menguar su patrimonio, y fue así que en 1897 aceptó del Gobierno de Udaondo un puesto en la Administración de la Provincia.

Radícase entonces en La Plata, donde la de los Dillón es una familia pionera. Al respecto vale aclarar que siendo la suya una familia de origen irlandés afincada en el país en lejanas épocas coloniales, algunos miembros variaron ligeramente el apellido acentuándolo, quizás como una forma de acriollarlo. Los descendientes del poeta lo volvieron a su forma original.

Si bien no publicó libros, en los albores del Siglo XX creó y dirigió la revista costumbrista “La Pampa”, y desaparecida ésta, tras nueve años de problemas personales, no tuvo inconvenientes en sumarse como activo colaborador en la competidora “La Pampa Argentina”, donde fue valorado como un poeta “genuinamente criollo”, sentenciando en su honor: “¡Dichoso el hombre que puede inclinar la cabeza con la íntima satisfacción de haber honrado la sangre de su raza!”.

Le hemos verificado una intensa colaboración entre 1911/1916, como que también muchas veces firmaba solo como “Almagaucha”, o este seudónimo y las iniciales “J.A.D”.

También difundieron sus composiciones las revistas “Caras y Caretas” y “El Palenque”.

Su nombre estuvo vinculado al ambiente payadoril de su época, y como tal fue incluido en el  “Diccionario de Payadores”.

Tenía 87 años cuando falleció en La Plata en 1942.